La actividad consistió en invitar a merendar a las familias mientras disfrutaban de un ratito de lectura al aire libre. En la realización de la actividad se cumplieron todas las medidas de seguridad de prevención frente al Covid-19 previstas para la organización de eventos culturales en espacios abiertos.
Ya sea con cuentos leídos o escuchados, con imágenes, con palabras, con familia, con amigos... sea como sea, este picnic literario al aire libre trae momentos agradables en un entorno distinto y hace que los niños amen un poco más los libros.
Belén Martín Organero, responsable de la Biblioteca Municipal, ha informado que, dada la buena acogida de la actividad, es muy probable que se repita próximamente.
